Alcides Aliaga Encinas

Antes de referirse al objeto mismo de esta información, creo un deber efectuar somera reseña de los objetivos de toda técnica moderna para la conservación de documentos y consiguientes archivos que constituyen invalorables tesoros históricos para un país, para una institución o para una persona.

En toda época - aun desde tiempos remotos- la conservación de documentos ha constituido un principio, un objetivo y una necesidad.

Se utilizaron medios y métodos que creyeron más adecuados y seguros para su época en materia de catalogación y conservación de esos documentos conceptuados como la propia de entidades grandes o pequeñas. Esos métodos antiguos han sido siempre deficientes.

Lo demuestra el deplorable estado de pérdida o destrucción de valiosos documentos por factores del tiempo transcurrido, por la presencia de factores primarios de destrucción como corrosión por humedad, por la presencia de insectos y alimañas que tienen fácil acceso allá donde existe inadecuada protección.

En todos los países, incluyendo el nuestro, se han intentado campañas para la preservación de documentos. La lucha ha sido desigual contra esos factores adversos.

La madre naturaleza también pródiga en factores negativos de destrucción, por una parte; la indolencia humana, la falta de medios económicos y técnicos por otra, han contribuido a la pérdida o destrucción de invalorable material escrito de archivos y bibliotecas.

Al presente, alguna parte de ese material aún utilizable puede ser restaurado; sistema que por constituir técnica moderna, significa fuerte inversión económica, sea para el adiestramiento de personal o para pago a organizaciones especializadas en la materia.

Concepto de Organismos Internacionales: Organizaciones Internacionales conocidas dan cuenta mediante gráficos y fotografías, del lamentable estado en que se hallan algunos archivos en la América Latina, mostrando desorden, hasta hacinamiento de documentos. Prudentemente no se dan nombre de esas entidades o países donde se maneja así el material archivable.

También se demuestra el estado de deterioro de antiguos documentos rutinariamente empastados, cuya restauración constituye un problema casi insoluble en lo que concierne al contexto literario dañado o un trabajo de alta categoría y costo.

Hablando del país, no se puede soslayar la deprimente realidad en que se hallan aun calificados archivos y bibliotecas en los que descansan valiosas páginas, de la historia patria, de entidades públicas y privadas que también en ellas tienen su historia.

Desde tiempos atrás, ese interés por conservar la documentación ha sobrepasado los límites de cada entidad, de cada país, hasta convertirse en problema multinacional.

Así la Asociación de Archiveros de Caracas, Venezuela, bajo el patrocinio del Gobierno ha realizado el Primer Congreso Boliviano de Archiveros entre el 13 y 17 de diciembre de 1967, al que fueron invitados delegados del Instituto de Investigaciones de la Facultad de Derecho de la Universidad de "San Simón" de Cochabamba y del Archivo Nacional de Sucre (Bolivia).

Hablando siempre de una conformación regional de países latinoamericanos interesados en colocarse a tono con la cultura general se puso en práctica uno de los mandatos de la Declaración de Presidentes latinoamericanos reunidos en Punta del Este (Uruguay) en el año 1971 y con él, se manifestó tal determinación con claves internacionales como ser a V y VI Reunión del Consejo Interamericano de Maracay, Colombia, en 1968 y en Port Spain, Trinidad, Tobago, en 1969 bajo los auspicios de la Organización de Estados Americanos (OEA). Las bases positivas del llamado Programa Nacional de Desarrollo Cultural son concretadas en la VI Reunión de Trinidad Tobago, con lo que comienza una acción concreta con el Proyecto de Desarrollo de Archivos dentro del área de "Conservación y Fomento del Patrimonio Cultural de la OEA".

En tal proyecto se señala la "Necesidad de conservar los documentos y libros valiosos para el Desarrollo del Continente", esto sin duda, mediante la utilización de tecnologías modernas para también la modernización de los Archivos y Bibliotecas de los Estados Miembros.

La preparación del personal "para la dirección y organización de archivos históricos y administrativos, para conservar el patrimonio histórico y cultural de los pueblos de América" es otro de los objetivos inmediatos. Según se declara, la Reunión Técnica sobre Desarrollo de Archivos efectuada en julio de 1972 en Washington, fue la fuente inspiradora de las actividades del Proyecto Multinacional mencionado y la unificación de esfuerzos entre las bibliotecas y centros de documentación, constituye otro objetivo primordial. Asimismo se recomienda en tal proyecto, la designación de la Escuela de Archiveros de la Universidad de Córdoba, Argentina, como Centro Multinacional de Formación de Archiveros y se da cuenta de la Organización del Consejo Interamericano de Archiveros (CIDA). Como se ve, abundan las consideraciones para hacer positivo el funcionamiento del Proyecto Multinacional de desarrollo de Archivos bajo condiciones de estímulo económico, legislación adecuada, ayuda oficial para edificios de Escuelas de Archiveros y equipamiento necesario en cada país.

La existencia de Archivos y Bibliotecas en los actuales momentos de la Era Atómica que determina en avance práctico en todas las actividades humanas mediante modernos sistemas de desarrollo que es base de lo pueblos, no se cuenta con el revolucionario sistema de la Microfilmación.